Una básica pincelada

No todos los problemas tienen solución., sino imaginad una persona conducida a la demencia.

Se disponía ella a levantarse cuando se percató de algo. no era nada físico, nada tangible. Era algo abstracto, un algo que incluso ella no podía explicarse a sí misma. no necesitaba que la cuidasen, ella ya era lo suficientemente mayor como para hablar y decidir sus actos; sólo buscaba que la aceptasen las personas que querían estar a su lado. No importa el lugar, la edad o el sexo.

Por fin estaba a gusto consigo misma y le daba igual si los demás no se sentían a gusto con su compañía. Fuerza vital. poco a poco iba alegrándose el corazón. Ella misma junto con la mujer que le dio la vida.

Tan simple y tan clara. Esa mañana el sol se asomaba poco a poco. Y no hablo de la estrella luminosa ubicada en el universo, sino a su fuero interno.


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