Las personas somos transeúntes de una vida que no pasa volando, sino con el tic tac del reloj.
Se cruzan las vidas de las personas tomándose tiempo, pero no con la dedicación de un ahora. Existe la sensación del después, sin saber que el después solo existe en su cabeza.
El amor es invisible, pero si sensible al corazón y al alma. Es ese brillo en la mirada, es dejar lo mejor para la otra persona, es ser el mejor amigo, amante y pareja. El amor es querer recorrer el mundo sea como sea con él/ella.
El amor es sentirse pequeños y grandes a la vez; es pensar que un rasguño de esa persona es como si te hirieran a uno mismo por dentro, se llama tomar importancia a lo más mínimo de esa persona.
El amor es la sensación de querer volar agarrado de la mano; es un sentimiento de paz, tranquilidad y emoción. Este es querer dedicarle tiempo y a la vez espacio. Este es desear y sentirse deseado.
El amor es magia. Amor es la sensación de que a pesar de estar enferma y decaída quiera abrazar a esa persona y se sienta mejor con solo su olor de piel. El amor es discutir riendo o terminando haciendo el amor.
El amor es cuidar el uno al otro.
El amor es no mirar atrás, sino adelante siempre. Es compartir sonrisas y lágrimas. Es abrazar en las pesadillas de la otra persona y también es escuchar alegrías y que te cause alegrías y no problemas ajenos de otras personas. El amor es alegrarte el día con solo una broma o un piropo.
Pero... hoy en día las personas son reemplazadas. Son humanos que van y vienen, que el tiempo solo lo quieren con la otra persona cuando les conviene. Actualmente, las personas no saben lo que quieren porque no valoran lo que tienen o no van a por lo que desean.
Hoy somos páginas de un libro de otra persona o quizá solo un párrafo. Ahora somos las personas que no damos nada por nadie, o si acaso, menos de la mitad de los que nos aportan. El amor de ahora solo causa pena, decepción y hastío.
El amor de ahora es algo ingenuo e inseguro, lleno de miedo y engaño. El amor de ahora es pobre.
El amor de ahora no es amor, sino es destiempo.
La clave es dar y recibir, es decir, reciprocidad, pero ahora solo hay dar un 100% y recibir una miseria. Ahora lo das todo por alguien y no recibes ni algo que se asemeje al amor.
El amor entra por el corazón y la mente y sale por el mismo sitio.
El amor verdadero es amarse uno mismo.
Comentarios